Si eres un creativo y no tienes un portafolio ¿Qué esperas para crearlo? Y si ya lo tienes ¿Estás seguro de que funciona? El margen entre causar una buena impresión a tus posibles clientes y el hacer que huyan despavoridos es muy pequeño.
Por eso, hoy te traigo tres errores que yo he cometido al momento de crear mi portafolio (para que tú los cometas).
1-Mucha cantidad, pero poca calidad
Es momento de acabar con el mito de: “Mientras más, mejor”. Eso ya no se aplica, al menos cuando hablamos de portafolios. Lo ideal es tener una selección de tus mejores trabajos, los cuales demuestren de qué estás hecho y qué puedes ofrecer realmente a tus potenciales clientes.
Así que revisa minuciosamente todo lo que has hecho y escoge solamente aquellos trabajos que consideres los mejores, tanto por ti mismo, como por la recepción que haya tenido tu audiencia de ellos.
Eso sí, tampoco seas muy exclusivo y reduzcas la elección a dos o tres piezas de trabajo, no querrás que luzca muy vacío tu portafolio. Si sientes que es así, es momento de seguir creando contenido, hasta que sientas que tengas algo que realmente vale la pena mostrar al mundo.
2-Falta de organización y detalles
Cuando estés creando tu portafolio recuerda siempre que todo debe tener un propósito, no sólo debes mostrar tus mejores piezas, sino también explicar el por qué las escogiste y cómo pudiste ayudar a tus clientes con su creación.
Te recomiendo agrupar tus trabajos por categorías, empresas/marcas con las que has trabajado o tipos de proyectos según su clase. Esto no sólo hará lucir a tu portafolio mucho más profesional, sino que ayudará a la persona a la que está viendo tu trabajo a localizar más rápidamente lo que desean ver de ti.
También es importante que expliques cada trabajo que has realizado, no basta con una simple fotografía, logo o texto. Debes contarle a tu lector quién fue tu cliente, cuál fue el rol que ejerciste en el proyecto, cómo pudiste ayudar e incluso en cuánto tiempo lograste tu cometido. Los detalles también cuentan.
3-Poca funcionalidad
La idea de tu portafolio es mostrar tus mejores creaciones a clientes potenciales, por lo que no sólo debes mostrar calidad, sino también una información de contacto lo suficientemente visible y que invite a la conversación.
De nada sirve que tengas el portafolio más hermoso si tus empleadores no pueden contactarte. Así que asegúrate de tener una página de contacto y enlazar tus redes sociales, correo electrónico, teléfono y toda la información adicional que desees mostrar. Además, puedes añadir botones bajo cada proyecto llamando a contactarte.
Y si hablamos de un portafolio online, este debe poder verse claramente en todos los dispositivos posibles, no sólo a través de la computadora. El tiempo es oro para las personas, así que puede que un potencial cliente utilice su tiempo libre para revisar tu portafolio a su hora de comer desde su celular, por lo que debes asegurarte de que se vea perfecto en todas partes si no quieres desaprovechar la oportunidad.
Recuerda siempre que al momento de crear un portafolio o establecer una marca personal, la autenticidad es clave, así que refleja tu personalidad en todo lo que hagas y asegúrate de que estás dando los pasos correctos en la búsqueda de lo que deseas alcanzar.
¿Te gustaría ver mi portafolio e inspirarte? Puedes visualizarlo aquí.