TRISTE DICIEMBRE VENEZUELA
Debo enfocarme en esta época de diciembre, realmente es una realidad nefasta y destructiva, muchas familias padecen en las calles venezolanas, con el pensamiento acelerado tratando de descifrar el modo de celebrar estos días festivos sin que la precariedad consuma las horas felices de estos tiempos.
Nuestros días para compartir sin pensar en lo que va a suceder mañana se acabaron, solo un pequeño grupo puede darse el lujo de vivir como en los años pasados, muy triste porque todos nos merecemos el jubilo que nos caracteriza, «La alegría venezolana».
Señores no es casualidad que año tras año, diciembre tras diciembre seamos menos competitivos a la hora de disfrutar lo que nos merecemos, lo que ganamos con tanto esfuerzo durante el año de trabajo; es época de vacaciones y es lo menos que nos toca, porque?. Ustedes tienen la respuesta, deténganse un momento a pensar lo que hacen en el día y verán como nos tocara el corazón, es: lástima, tristeza, rabia, un sentimiento que no se parece nada a nuestro pasado.
Una anécdota para estas fechas, vivida por el autor mismo donde se pierde la ilusión de ser niño a causa de esta situación, donde ya no importa el sueño de un regalo para navidad, primero están los alimentos y nada mas, estas palabras vienen producto de una madre a la cual solo le alcanza para 5 productos de la cesta básica y sin una cierta idea de cuando podrá volver a adquirir los mimos o quizás algunos menos.
Palabras cortantes y dolorosas son: «Ya mi hijo no recibirá mas regalos porque no me alcanza ni siquiera para comer, «El no come juguetes». Pensamiento venezolano de desesperación aguda por falta de recursos. Impresionante pero es la realidad en muchos hogares venezolanos.
Venezolano con esperanza soy
Doy fe que vamos a salir de este proceso tan riguroso y asfixiante, pero por ahora nos toca «comernos las verdes» como decimos aquí en la madre patria, luego veremos, luego estaremos en pie para reabrirnos al mundo decembrino que conocemos y celebramos hace unos años.